El derecho al olvido sigue quemando etapas para su futura inclusión en el reglamento europeo de protección de datos. Los ministros de Justicia de la Unión Europea han llegado finalmente a un acuerdo tras tres años de unas difíciles negociaciones.
El texto resultante de estas negociaciones, apoyado por todos los estados miembros de la UE excepto Austria y Eslovenia, servirá como base para las negociaciones que se iniciarán en el Parlamento Europeo el próximo 24 de Junio y que debería desembocar en un acuerdo definitivo antes de que acabe el año.
El derecho al olvido en el reglamento de protección de datos
Dzintars Rascnasc, ministro letón (cuyo país ostenta la presidencia de turno de la Unión), hizo las siguientes declaraciones tras cerrarse el acuerdo:
«Estamos ante algo muy importante, ya que el nuevo reglamento dará a todos los ciudadanos de la Unión un mayor control de todos sus datos. Ahora podrán pedir el borrado de sus datos en internet”.
Rascnasc, al igual que el resto de representantes europeos, ha mostrado un gran optimismo ante la aprobación del derecho al olvido en Internet asegurando que “va a modernizar los principios generales y va a ofrecer un reglamento armonizado para todos los Estados de la UE”. Además, los ciudadanos se verán beneficiados ya que, en caso de incumplimiento por parte de los motores de búsqueda podrán recurrir ante los reguladores de la protección de datos para garantizar el cumplimento de sus derechos y la protección de sus datos personales.
Rafael Catalá, ministro de Justicia español, también se ha mostrado contento tras la rúbrica de este acuerdo:
«Estamos muy satisfechos con cuál ha sido el resultado final, que ahora pasa a esos trílogos para su aprobación futura”.
El ministro ha destacado que se en las negociaciones se ha buscado “reforzar aspectos tales como el tratamiento de los sectores más protegidos como son los menores”.
Visión económica del derecho al olvido
Esta norma así como los nuevos cambios en la reglamentación de la protección de datos cuenta con una fuerte componente económica. Los ministros de Justicia europeos consideran que la aprobación de estos cambios servirán para reforzar y facilitar las operaciones comerciales transfronterizas entre empresas potenciando de manera notable el desarrollo de un mercado único.
Según explicó Catalá, con esta norma se ve mejorada la protección de datos de los ciudadanos pero que además también refuerza un mercado de datos para empresas así como su flexibilidad reforzando la actividad económica.
La modernización y adaptación a la realidad actual de la normativa europea de protección de datos de 1995 además de garantizar un mayor control de los usuarios de sus datos personales en Internet y redes sociales podría reducir las cargas burocráticas para las empresas en unos 2.300 millones de euros.
Algunos de los cambios más notables que se debatirán en el Parlamente Europeo sobre las modificaciones en la protección de datos se incluye un mayor control para los usuarios de sus datos personales en redes sociales así como la imposición de sanciones más duras.
En lo referente exclusivamente al derecho al olvido en Internet, el nuevo texto consolida su aplicación aunque desde la Comisión Europea se ha recordado que “no es un derecho absoluto. Tiene sus límites pero será analizado caso por caso”. A niveles prácticos, no se introduce ninguna modificación en lo que conocemos hasta el momento, es decir, que los ciudadanos pueden pedir directamente a los motores de búsqueda la supresión de ciertos enlaces a información personal. Unas peticiones evaluadas de manera individual y que pueden ser aceptadas o no en función de diversos criterios entre los que se incluyen la vigencia y actualidad de los datos.
Este debate al máximo nivel europeo se produce a escasas fechas del primer aniversario de la sentencia del Tribunal de Justicia de Luxemburgo que reconoció el derecho al olvido de los ciudadanos.